Qué hay que tener en cuenta a la hora de instalar un punto de recarga para nuestro coche y cómo tenemos que proceder.
Los coches eléctricos van ganando adeptos y poco a poco van haciéndose un hueco en el mercado. Estos vehículos son más respetuosos con el medio ambiente y ofrecen una alternativa más sostenible al coche convencional. A la hora de elegir un vehículo eléctrico, una barrera puede ser la facilidad de disponer de un punto de recarga en tu plaza de garaje comunitario.
Tal y como indica la Ley 49/1960, de 21 de julio, de Propiedad Horizontal en el artículo 17 punto 5:
La instalación de un punto de recarga de vehículos eléctricos para uso privado en el aparcamiento del edificio, siempre que éste se ubique en una plaza individual de garaje, solo requerirá la comunicación previa a la comunidad. El coste de dicha instalación y el consumo de electricidad correspondientes serán asumidos íntegramente por el o los interesados directos en la misma.
Simplemente hay que informar por escrito, de manera oficial, al presidente de la comunidad o administrador de que se va a realizar la instalación, y guardar copia del documento con fecha y firma. En el caso de que la plaza de garaje sea de alquiler, también se puede instalar un punto de recarga. Pero para ello, se necesitará la autorización del propietario de la plaza.
La toma de electricidad
El punto de recarga necesitará electricidad, y para ello hay dos opciones. La instalación eléctrica toma la electricidad del mismo aparcamiento o se realiza una instalación del propio contador de casa. En el caso de que la electricidad se tome del parking, será necesario instalar un contador de consumo eléctrico. De todas maneras, cada instalación es diferente, el instalador deberá valorar qué opción es la más fácil y económica.
En edificios de nueva construcción, un Real Decreto de 2014 obliga a que ya lleven una preinstalación, lo que facilita la posterior instalación de los puntos de carga que sean necesarios.
Como veis, la instalación de un punto de carga no requiere de una gran estructura y la legislación apoya totalmente su instalación. La inversión se recupera pronto, con las diferentes bonificaciones y el ahorro con respecto a la gasolina y el diésel.