Vender una vivienda no es un proceso sencillo, debemos tener en cuenta muchas cosas: precio y condiciones de la vivienda, estudio del mercado, trámites burocráticos, legalidad actual… Si estás pensando en vender tu casa, seguramente te habrás preguntado si es necesario contar con una agencia inmobiliaria o no.
Hoy explicamos los errores más comunes que se suelen hacer a la hora de vender una vivienda sin agencia.
Establecer un precio incorrecto
Antes de poner a la venta nuestra vivienda, es importante que conozcamos la situación actual del mercado inmobiliario. Investigar el precio del metro cuadrado de nuestra zona, los precios de viviendas parecidas y solicitar una tasación.
Poner a la venta una casa con un precio más elevado dificultará las posibilidades de venderla y si ponemos un precio bajo, daremos una imagen negativa de nuestra casa.
No quitar los elementos personales de la casa
Cuando un futuro comprador visita nuestra casa, necesita imaginarse viviendo allí. Si cuando realizamos la visita, nuestra vivienda está llena de objetos personales le será mucho más difícil. Es recomendable amueblar el piso con un mobiliario neutro que destaque lo más atractivo de la casa.
No apostar por el home staging
Hacer un lavado de cara a nuestra casa es muy importante antes de ponerla a la venta. Reparar aquellas goteras o pequeños desperfectos, vaciarla y decorarla expresamente para las visitas nos permitirá revalorizar nuestra vivienda y que sea más fácil venderla en buenas condiciones.
Muchos compradores eligen si compran o no en los primeros segundos de la visita, por lo que debemos mostrar la casa en las mejores condiciones posibles.
Crear anuncios con errores
No encargar las fotografías a un fotógrafo profesional, no redactar bien la descripción de nuestra casa u omitir información esencial como los metros cuadrados, tipo de suelos y cierres son algunos de los errores más comunes.
Antes de poner a la venta una vivienda debemos contar con toda la información necesaria, como por ejemplo el certificado energético y todos los justificantes de pago de impuestos y servicios.
No estar dispuestos a negociar
Si nos cerramos a negociar y nos quedamos estáticos en una cantidad, podemos perder buenas ofertas por nuestra vivienda. Debemos tener claros nuestros límites para no tener pérdidas en la venta, pero sí debemos estar abiertos a las propuestas que nos hagan llegar los futuros propietarios.
No filtrar o atender a los posibles compradores
El tiempo es oro y muchas veces no podemos dedicar todo el tiempo que necesitamos a vender nuestra casa. Debemos filtrar las peticiones de visitas y centrarnos en aquellas que realmente nos interesen. Debemos mostrarnos flexibles a la hora de concertar una cita con los posibles compradores, si ofrecemos pocas horas de visita corremos el riesgo de que se decanten por otra vivienda.
Por otra parte, debemos ser rápidos y ágiles en contestar, para ello debemos dedicar unos minutos cada día a los posibles compradores. La experiencia nos dice que los primeros en contactar suelen ser los más interesados y las posibilidades de cerrar un buen acuerdo son mayores.
No contar con la ayuda de una agencia inmobiliaria
Todos los errores antes mencionados, se pueden evitar contando con los servicios de un equipo profesional como GuinotPrunera. No únicamente te asesoraremos para ofrecer tu vivienda al mejor precio y con las mejores condiciones. Además, también nos encargaremos de las visitas y todos los trámites burocráticos.
Contar con una agencia inmobiliaria te permitirá agilizar todos los trámites burocráticos, y al conocer la legislación actual te ahorrarás posibles problemas con la administración pública. Si quieres vender tu casa, ponte en contacto con nosotros y un profesional te acompañará en todo el proceso de venta de la vivienda.