En el artículo de hoy vamos a daros algunos consejos para mejorar la velocidad y ver los errores comunes que solemos realizar a la hora de instalar el router
El uso que hacemos de la red wifi de nuestra vivienda va en aumento y muchas veces esto se traduce en una disminución de la velocidad de navegación. Si apostamos por una casa inteligente, cada vez son más los dispositivos que funcionan a través del wifi. Si además le añadimos el teletrabajo, clases varias y el visionado de series y películas en la smartTV, puede ser que nuestro wifi se colapse.
Ubicación del router
Si queremos sacar el máximo partido a nuestra conexión, la ubicación del router es determinante. La potencia de la señal es inversamente proporcional a la distancia, así que debemos colocarlo en la parte central de la vivienda.
Paredes, muebles, techos y suelos son elementos que funcionan como obstáculos para que llegue la señal wifi. Estos elementos no son evitables, por eso es importante decidir dónde instalar el router.
Debemos colocar el router alejado de paredes, rincones y sobre todo evitar tenerlo empotrado en algún mueble, rodeado por casi todos sus lados. Es recomendable colocarlo en una posición relativamente alta, ya que envía las ondas hacia abajo y así no desaprovechamos parte de su alcance.
Revisar la antena
No todos los routers lo permiten, pero cambiar las antenas nos puede dar más potencia. Los últimos modelos tienen incorporadas las antenas de forma que no sobresalen del dispositivo, así que no será posible cambiarlas.
Si vuestro modem tiene dos antenas, recordad que deben formar un ángulo de 90 grados, una debe estar en vertical y la otra en horizontal. De esta forma mejoramos la cobertura en los dispositivos que están más alejados.
Apostar por amplificadores de señales
Si queremos conseguir cobertura wifi en toda la vivienda, podemos instalar amplificadores y repetidores de red que extienden el área de cobertura. Estos dispositivos captan la señal y la amplifican, ya sea mantenido la red wifi original o creando una propia.
Una de las opciones más utilizadas en los últimos años es la instalación de redes Mesh o redes en malla, capaces de ofrecer una cobertura mejorada. Este tipo de red está formada por una base principal que se conecta con diferentes puntos de acceso que se comunican entre ellos por medio de un enlace inalámbrico.
Mantener los dispositivos actualizados
Otro de los motivos por los que la red wifi puede ir más lenta de lo que debería, es que el software y el firmware, tanto de los dispositivos como el router, no están actualizados. Algunos dispositivos se actualizan automáticamente, pero otros no. Tendremos que leer las instrucciones de uso para saber cuáles debemos realizar la actualización manualmente.
Es importante mantener actualizados todos los dispositivos y no únicamente para que vayan más rápidos, sino para mejorar su seguridad y evitar que puedan ser hackeados.
Renovar el router
Si nuestro router ya tiene muchos años es posible que haya quedado desfasado. Podemos ponernos en contacto con nuestro proveedor de wifi y que nos informen de las últimas novedades o podemos comprarlo por nuestra cuenta.
Como podéis ver, son varias las acciones que podemos realizar en nuestra vivienda para mejorar la velocidad de nuestra red wifi y poder disfrutar de todos los beneficios que nos aporta.