Si hay un tema que ocupa portadas de diarios, abre las noticias y está en todas las conversaciones es la nueva factura de la luz que entró en vigor el pasado 1 de junio.
La nueva factura eléctrica nace con el objetivo de fomentar el ahorro energético, el autoconsumo y el despliegue del vehículo eléctrico.
Para saber cómo nos afectarán los cambios es necesario saber a qué mercado estamos acogidos. Actualmente hay dos: el Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) y el mercado libre. El precio de la luz en el mercado PVPC es una tarifa oficial que fija el Gobierno y en el mercado libre, el precio se fija entre particular y comercializadora. Según los últimos datos, 10,7 millones están acogidos al mercado PVPC y 17,1 millones están en el mercado libre.
Conceptos básicos de la factura de la luz
Antes de empezar a hablar de los cambios que supone la nueva factura, hablemos de algunos conceptos clave. La factura de la luz se compone de cinco términos que hay que tener claros para entender las últimas modificaciones:
• El término variable es el coste de la energía: lo que se paga en función del consumo.
• El término fijo es lo que el usuario paga por recibir el servicio, independientemente del consumo.
• El alquiler del equipo de medida o contador.
• El impuesto eléctrico.
• El IVA al tipo general, del 21%. (Pendiente de posible rebaja)
¿Qué son los peajes?
Si hay unos protagonistas en este tema, son los peajes. ¿Pero qué son? Son la parte de la factura que sirve para pagar los costes de transporte, distribución, las subvenciones a las renovables y otros conceptos.
A partir de ahora todos los consumidores pasan a tener un peaje con discriminación horaria en los términos de potencia y energía: los famosos tramos horarios que de mayor a menor coste son punta, llano y valle.
Esto quiere decir que el precio será diferente según el horario de consumo:
Otro cambio importante es que ahora se podrán contratar dos potencias. El usuario podrá disponer de una potencia eléctrica en las horas valle y otra para los periodos punta y llano. Así nos evitaremos pagar sobrecostes de potencia extra. A partir de junio será muy importante elegir la potencia eléctrica de una vivienda para no pagar de más.
¿Pagaré más o menos con la nueva factura de la luz?
Depende, variará en función del consumo y de la tarifa de la luz que se tuviese antes. Según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), la facturación de peajes y cargos se reducirá para los consumidores que hasta ahora no tenían discriminación horaria. En cambio, aumentará para los consumidores que ya estaban acogidos a la discriminación y tenían un precio mucho más barato.
Cómo afecta a los usuarios acogidos al mercado libre
El comercializador deberá adaptar el precio del contrato para incorporar la diferencia de los costes regulados. ¿Cómo se traducirá en la factura? Cada compañía deberá hacer sus cálculos y avisar a sus clientes de los cambios en función de su tarifa de la luz.
Las operadoras tienen dos opciones: Adaptar el precio del contrato a los nuevos periodos de energía o mantener los tramos de precios actuales y trasladar al precio la diferencia de costes que resultaría para su perfil de consumo.
¿Qué podemos hacer para reducir la factura?
Según la CNMC existen varias posibilidades para reducir la factura:
• Adecuar la potencia contratada a las necesidades reales. Podemos acceder a los datos de potencia máxima y consumos a través de la web de nuestra distribuidora.
• Evitar simultanear consumos, para poder reducir la potencia contratada.
• Desplazar el consumo a periodos fuera de las horas punta.